jueves, 5 de febrero de 2009

DAY BY DAY

Por la mañana el Bubisher está en la escuela Abda Moahamed; Busrid y Ali Laman, maestros de español, se llevan cada uno 15 ejemplares iguales de los de la colección media lunita, así como también con un lote variado de álbumes, “Frederick”, “Los tres ladrones”, “El viaje de Pancho”, “Un barco en el cielo”...todos libros para ver y trabajar con los niños en clase.
Un rato después, todavía en el cole y a bordo del Bubisher, Abdulah está dibujando con ceras de color marrón la cabeza de un caballo; sus compañeros de clase, que poco antes también han estado viendo y leyendo cuentos, pintan ahora mariposas, jaimas, osos, banderas, niños...

Después de comer, Dargalha, que está recibiendo clases de español en la Casa de la mujer, viene a devolver el diccionario de español-árabe hassanía que se llevó en préstamo ayer.
Marin trae también “Dignidad”, un libro de fotografías hechas aquí en los campamentos y que entregaron en donación el otro día.

Por la tarde Mai y Salka se hacen cargo del Bubisher; un par de horas subiendo y bajando niños, repartiendo libros a unos y otros, buscando un sacapuntas, o poniendo la música saharaui más marchosa en el ordenador...

A un pequeño grupo de niñas, Memona lee Blancanieves (no la de Disney, una versión publicada por Kókinos); va leyendo un trozo en español, y después contándolo en hassanía; luego, ya a su bola, una de las niñas, Aglaham, se pone a mirar, con muchísima atención, las ilustraciones del libro.

Zuber viendo el cómic “Tito Longueirón” reconoce en una fotografía al final del libro a uno de sus autores, David Pintor, al que conoció en Lugo.

Cuando entra la noche les toca a los adolescentes y jóvenes. Algunos libros, pero sobre todo más música y mucha conversación. Entre otras y otros, está otra vez aquí Dargalha, con sus ganas de aprender español.

Y todo este rato, Mohamed Ali de dos años y medio no ha dejado de subirse a la mesa, coger esto y lo otro, hacer por pintar las paredes con rotulador, tocar las teclas del ordenador... además de haber intentado sabotear de otras tantas maneras posibles este mail guardado ya mismo en el pen drive.

Muchos besos a todos, Javi.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Te mereces un descanso, Javi, pero si puedes, por favor, ve a la jaima de una guessena, y que haga un Javi virtual, una copia de Javi que se quede para siempre en el Bubisher...
Tenemos ganas de darte un abrazo gigante, pero también queremos que tu espíritu siga impregnando el Bubisher.

clarabailo dijo...

me emociono muchísimo cada vez que leo las nuevas entradas que colgáis. por fin hoy me decido a escribir...
javi, enhorabuena por todo el curro. creo que nadie hubiera esperado un comienzo mejor para el bubi!!
felicidades también a los que siguen el trabajo desde otros lugares. ánimos a los nuevos que llegan al relevo. saludos a los conocidos.
en londres, despacio, pero sigo con unos dibujitos para el bubi. a ver si sé plasmar un day by day como el que aquí se cuenta...
¡un fuerte abrazo!